Yorito Morimiya es un aficionado fotógrafo del Cielo. Estaba dirigiéndose como todos los días hacia unas de las Bahías del pueblo preparándose a tomar unas fotografías del cielo al amanecer, cuando de pronto se encuentra con una misteriosa chica en plena madrugada dándoles de golpes a una máquina surtidora de refrescos por no devolverle la bebida que había solicitado. Yorito ofrece su ayuda a ésta chica pero en el momento en el que finalmente lo ha logrado… la chica ha desaparecido.